martes, 14 de septiembre de 2010

dolor de corazón y un dulce para calmar mis penas

Sí, puede que sea la persona más malvada del planeta, esa que sólo quiere su beneficio personal para sentirse bien en todo momento, esa qué, en cada discusión decide hecharte la culpa de sus penurias a consecuencia de tus errores, pero soy yo quien reclama porque te ama y no acepta que exista tanto barro tras años de relación.
Entonces, luego de haber gritado como una energúmena y, haberme hechado a llorar como una niña en tus brazos, tú me abrazas y me haces entender que si estamos aquí juntos, es porque en realidad nos amamos.
Y por fin lo entiendo, no me dejaste por nadie, regresaste a mí porque soy única para tí, y es importante que sepas que tú eres el único amor de mi vida.

No hay comentarios: