miércoles, 5 de noviembre de 2008

Bienvenida

Es que no sé como explicártelo, cuando no estás me haces mucha falta pero cuando estás junto a mí, salen tus demonios y siento que no puedo. No sé qué pasa pero es como que me dan miedo tus reacciones.
Ese tipo de reacciones que piensas que puedo tener ya no están más en mi. Ya no hay forma de rebajarme.
Estuve depre toda esta semana tratando de pensar en las cosas que hago mal y como poder cambiar. Sé que no voy a poder "encontrar a una chica igual"; es decir he tenido pocas relaciones y muy cortas que acabaron porque ellas no me pedían anormalidades sólo compartir, pero yo como no les podía entregar nada de mi y me terminaba alejando. Sin embargo, contigo es diferente. Eres la única que me ha entendido y acompañado, pero tampoco quiero involucrarte en mis rollos. Siempre pienso en aquello que me dices de no hacerte perder el tiempo. Estoy aterrado con eso porque siento que puede que sea verdad y no quiero hacerlo. Y sé que en este tiempo no te he correspondido como hombre y es lógico que en cualquier momento tú puedas tener algo con alguien y yo no tendría porque reclamarte de hacerlo. Estás en tu derecho.
Exacto.
Sé que podrías vivir sola sin mí y hasta pienso que te iría mejor. Tú eres de aquellas personas que rápido se adapta y encuentra amigos que te quieren y te buscan, siempre me llegó eso de ti; es decir, el llegar a tener tan buenos amigos.
Yo sólo tengo ganas de conocer a otros hombres... Me digo a mi misma: estoy con un sólo hombre desde hace 5 años y medio y es demasiado. No sé como termine esto.
Bueno intentémoslo.

No hay comentarios: